sábado, 12 de abril de 2014

Capitulo 7 Los que ya no se demoran

Un par de meses despues de la aventura con los beornidas se encuentran en la posada oriental, (al fin y la cabo tienen un año gratis de estancia), cuando un par de elfos entran en el salon comun y preguntan por los heroes que rondan la zona. Dodi les aclara que deben estar preguntando por los pj´s, que en ese momento estan medio trompas cerca de la chimenea. El elfo vuelve a preguntar para cerciorarse y Dodi se lo repite. El elfo se vuelve hacia ellos negando con la cabeza. se acerca y les comenta que necesitan de su ayuda y si pueden acompañarle hasta la puerta del bosque. Sin nada mas que hacer e intuyendo una recompensa se preparan y parten con los elfos.
Puerta del Bosque

Al llegar reconocen a uno de los elfos que los esperan, se trata de Galion, el elfo que ya salió de aventuras brevemente con Bern y Violeta. Les acompañan un elfo rubio bien vestido y una elfa de aspecto majestuoso.
El elfo rubio se presenta como el principe Legolas Hojaverde del reino del bosque y ella la dama Irime, de la casa de Gil-Galad.
-Ella ha pedido que la escolteis en su camino hasta las ruinas de Haycombe,donde los hijos del señor Elrond la llevaran hasta Rivendel. Confió en que la protegereis por encima de todo. No os preocupeis por la recompensa, haced esto que os pedimos y mi padre os recompensará adecuadamente-.
Acto seguido Leegolas y varios elfos se internan en las sombras del bosque. Galion e Irime a caballo aprestan a seguir el camino. Durante dias cruzan alegres campos verdes y riachuelos con pajaros trinando alegremente por la pronta llegada del verano. La dama Irime observa con atención los paisajes y su belleza para no olvidarlos en las Tierras Imperecederas mientras canta bellas canciones en elfico. A veces Violeta pierde los estribos y le grita que se calle. Habla sobre puentes ya caidos u historias de hombres valientes ya olvidados.
Cruzan el Viejo Vado pagando una pequeña tasa a los beornidas que lo vigilan y cuidan. Los verdes prados de los beornidas pasan a ser campos salvajes de maleza y piedras y los primeros grupos de arboles donde acampar con seguridad fuera del camino. Dias despues remontando el Paso Alto se dan cuenta que les están siguiendo desde hace dias como si supieran a quien escoltan. Al dia siguiente se ven atrapados por varios grupos de orcos y montan un sitio donde defenderse.
De noche solo ven decenas de antorchas mas abajo. Irime susurra algo  a un pajarillo que vuela raudo y veloz desapareciendo en la oscuridad. Una voz ronca les apremia a entregar a la elfa.-Entregad a la elfa u os mataremos-. Varios insultos como respuesta despues, los orcos cargan camino arriba con el lider uruhk negro a la cabeza. Justo antes de llegar la primera linea de orcos, Irime alza su mano  y un fulgor blanco centelleante ciega a los atacantes dandoles la iniciativa a los pj´s. Rodwen y Galion asaetan los flancos y Bern y Violeta golpean con saña y furia el centro de la columna.
Pero por cada orco que cae aparecen dos mas para ocupar su puesto. Pronto el cansancio hace mella en los pj´s, que aprovechan cualquier momento para recuperse. Irime se separa mas atras y de repente un par de garras enormes de un aguila la levantan y se la llevan del lugar. Por cada uno de la escolta un aguila lo levanta y lo lleva lejos de los orcos que ganan la posición con el ultimo envite. Estos viendo a su presa huir disparan flechas pero los debiles arcos de cuerno de los trasgos de las montañas no alcanzan donde las aguilas pueden alzarse.

La oscuridad de la noche los envuelve y pronto se ven posados gracilmente en una planicie de roca que se alza mas alto que los valles. Se encuentran en el Nido de las Aguilas. Allí son recibidos por Gwaihir, rey de las aguilas, que les pregunta por su cometido,para ver si son puros de corazón, porque de todas formas
puede detectar si le mienten (así se divierte). Irime habla en un extraño idioma con el aguila y al final ella lo abraza cariñosamente como si fueran buenos amigos que no fueran a verse nunca más. El aguila se despide y les dice que sus congeneres les transportaran hasta las ruinas de Haycombe más allá del Paso Alto y a distancia de cualquier orco. Descansan esa noche y por la mañana  montan en las aguilas que les ofrecen una vista de las Montañas Nubladas y sus valles unica e insuperable.


 


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